miércoles, 26 de noviembre de 2014

Al hincha de River


Te escribo a vos, a ese hincha de River que mañana va a ir a la cancha con su viejo, su abuelo, su hermano, primo o hijos. A vos, que también vas a compartir la tribuna conmigo y con decenas de miles más que ni siquiera conocés pero que sienten lo mismo que vos.

Mañana es "el" día. El día para que los jugadores demuestren que están a la altura de la ilusión que generaron en nosotros. Que dejen todo en la cancha porque enfrente está el rival de toda la vida, pero futbolísticamente. Porque nadie, en su sano juicio, piensa que esto es a vida o muerte. Nadie debe morir o terminar herido. Es un partido de fútbol y todo el folklore antes, durante y después, pero no más que eso. Esto es un juego, una pasión pero no más importante que una familia.

Todos, cuando salgamos rumbo al Monumental, dejaremos una familia que nos estará esperando. Muchos de ellos no lo entienden. "¿Cómo vas a ir a la cancha? ¿No viste lo que pasó ayer?" te preguntan. Y si, es lógico. Pero es más fuerte que nosotros. Y a pesar de ello, no hay que hacer locuras porque esa misma familia, nos espera a la vuelta, sea el resultado que sea. La única tragedia es que no volvamos o tengan que ir a encontrarnos en un hospital.

Mañana tenemos la oportunidad de demostrar que River Plate somos los millones de hinchas que aman al club, aman este deporte y el folklore alrededor de él pero JAMÁS a la violencia. Mañana podemos demostrar que hubo un corte, un quiebre con los violentos y que no los vamos a alentar más. Mañana nosotros tenemos que dar el ejemplo y dejar de hacernos los distraídos para poder exigirle a dirigentes, periodistas, políticos y oficiales de justicia que hagan lo propio. Porque primero dimos el ejemplo nosotros.

Mañana alentaremos a River, no a la violencia. 
Mañana alentemos a River, no a los violentos. 

1 comentario :

Clayton dijo...

Propongo que cuando entren "Los borrachos del tablón" los silbemos, chiflemos y abuchemos. Tenemos que demostrarles que estamos cansados que no nos son importantes, que el fútbol puede existir sin ellos. Es un pequeño aporte, pero que quizás, sea suficiente para que los que tienen que actuar hagan lo que les corresponde.