miércoles, 28 de septiembre de 2011

No nos encandilemos


Almeyda dijo que el partido de Gimnasia había sido el mejor del campeonato. Efectivamente así fue, al menos el segundo tiempo. Pero no hay que olvidarse que jugamos con un equipo de Primera División.

Este no es un detalle menor si tenemos en cuenta que todos los equipos contra los que River Plate no jugaba habitualmente, o nunca jugó, van a dejar la vida en la cancha para lograr un triunfo. Vimos equipos como Merlo dejando todo en el césped hasta el último segundo, luchando cada pelota dividida como si fuese la última y pegando como no teníamos memoria.

River se había acostumbrado en la primeras fechas a liquidar los partidos o no hacerse mucho problema. Luego llegaron fechas donde se le hizo difícil marcar una diferencia por la presión generada por el rival que, sumada a los errores propios, producían las situaciones de gol necesarias para que el rival anote.

Pero con Gimnasia es un rival diferente, un rival que no necesita de la “hazaña” de ganarle a River para dejarlo marcado en su historia. El Lobo jugó más tranquilo, más relajado y por ello le dio los espacios suficientes al equipo para desarrollar su juego y moverse con más libertad. Las carencias ofensivas y las fallas defensivas de su parte hicieron el resto.

No hay que encandilarse por un partido pero sí hay que tenerlo de referencia. River tiene que seguir creciendo como conjunto y seguir este camino que recién empieza.

No hay comentarios. :