La espalda de Aguilar

Van a decir que el árbitro nos robó, que no se podía jugar con tantos "lagunas" en medio de la cancha o alguna otra idea que marque la inventiva. River perdió esta serie, como casi todas las anteriores de las diferentes Copas de local. No nos equivoquemos.

Señores, River es un desastre, de arriba para abajo. River hoy no tiene delanteros, conductores, ni defensores. Y ¿por qué? Simple. Por Aguilar, Macchi y toda la dirigencia que levantó la mano cuando se vendían y compraban jugadores al por mayor o al por menor. Desarmaron un Club, un equipo, trajeron figuritas decorativas para probar a aquellos que no sabíamos ni siquiera el nombre en detrimento de las inferiores que daban frutos. Pero no fíjense bien quienes votaban a favor, quizás se lleven sorpresas (mirá cómo votaron las ventas al por mayor).

Hoy River tiene que depender de jugadores a préstamo, o compras que no se entienden. Passarella pidió a los cuatro vientos a Rosales. Ni siquiera le dió continuidad y hoy no figura en ningún lado. ¿River le seguirá pagando su contrato?

Mientras tanto, por River pasó Salcedo sin pena ni gloria y va a otro equipo y funciona. Algo anda mal y no está entre los jugadores. Dirigentes que no tienen más que mostrar que su "caminar el club" no nos llevan a ningún lado. Aguilar es eso.

River necesita dos cosas: Olvidar este trimestre, sanear el club e investigar la gestión Aguilar a fondo para que todos sepamos si hubo irregularidades, algo que muchos sospechan.

Se terminó el semestre. Ahora sólo queda clasificar para la Libertadores, algo lejano, y votar en diciembre mirando menos lo que prometen o los nombres de los candidatos principales y más a quienes los acompañan.

Aguilar buscará cuidar su espalda. ¿Vos vas a votar al que se la va a cuidar?