Presos del irrealismo

"Ajustadisimo!" diría algún relator de boxeo. Así fue la aprobación del presupuesto. Sólo por seis votos el oficialismo (que debería contar con 100) pudo lograr hacer pasar su idea de un presupuesto que ya hoy es vox populi que es un dibujo.

Pero detrás de ese dibujo se esconde una idea irreal. Reza así: un club, en este caso River, está mejor administrado si se encuentra equilibrado o superavitario (auditado por uno de los mejores estudios para que no pueda ser objetable desde el punto de vista técnico).

¿Quién está mejor? ¿La Argentina o Estados Unidos? Estados Unidos estarás pensando. Sin embargo, Estados Unidos tiene déficit y la Argentina superávit. No todo lo que brilla es oro. Hoy tenemos que salir a vender jugadores, o rematarlos, para poder "equilibrar" las cuentas. Si recordamos, Marco Ruben fue vendido a Top Player, un grupo canadiense (pero no para jugar futbol americano, si vale el chiste), quienes finalmente nunca compraron al jugador pero "equilibraron" las cuentas mágicamente.

Asimismo, el presupuesto se basa sobre los supuestos, valga la redundancia, de que River vende jugadores por casi $60 millones y llega a altas instancias de las competencias internacionales. Esto último no es frecuente, al menos con el actual presidente y lo primero sería anticipar un remate generalizado de figuras o que se viene un nuevo Locarno/Empresario Amigo/Villareal a llevarse a las joyas de la abuela.

Esto último es gravísimo. River no puede anticipar que va a necesitar vender al por mayor para equilibrar las deudas. Si nos fijamos en qué gastamos encontraremos que lo hacemos en fútbol profesional y en sostenimiento de la estructura del club. Habría que replantearse esto también. Mucha gente no sirve para nada en el club, muchas cosas no deberían existir y esto tiene que terminar de una vez. River no es un lugar donde se hace beneficencia. Si tenemos canchas de tenis de un alto nivel, hay que pagar los costos como un club de alto nivel. Sino terminamos teniendo canchas de alto nivel para arruinarlas al poco tiempo por "falta de recursos". También habría que encontrar formas de generar recursos genuinos y esto se hace desde el marketing, desde la publicidad en otros sectores del club y desde los nuevos servicios al socio. No es tan dificil.

Con Adidas se pusieron un poquito más duros y lograron una buena renegociación, aunque siempre mejorable. Así debería ser con todo, desde el empleado para que cumpla sus obligaciones hasta las licitaciones para que se pague menos por un mejor servicio al socio.

Señores, si son hinchas de River ponganse los pantalones y hagan lo que tienen que hacer.